GA121 2ª Christiania (Oslo), 8 de junio de 1910 -La misión de las almas nacionales

GA 0121 Rudolf Steiner 


LAS ALMAS NACIONALES Y SU MISIÓN

CONFERENCIA 2

Christiania (Oslo), 8 de junio de 1910.


Se dijo ayer, que aquellos seres que deben ser considerados como espíritus nacionales, están en la etapa en que ellos en su existencia presente trabajan desde su "yo" sobre su cuerpo etérico o vital, que por lo tanto están modelando este cuerpo desde la parte más interna de su alma.
Ahora, por supuesto, se podría decir: que ciertamente debe admitirse que el trabajo sobre este cuerpo etérico o vital no puede verse directamente con órganos externos de percepción, con los ojos físicos, sino que esto es algo que pertenece a la conciencia clarividente. Pero, si la actividad de estos seres, de estos espíritus nacionales juega un papel en la vida humana, por otra parte, debemos ser capaces de señalar algo que es en cierta medida visible externamente, una especie de impresión, un tipo de reflejo de este trabajo de los espíritus nacionales o seres arcangélicos. Además de eso, estos seres en cierto sentido también deben poseer un cuerpo físico. Su corporeidad debe expresarse de una u otra forma. Y esta forma física en la que se expresa el trabajo, la actividad de estos seres, también debe indicarse de alguna manera en el mundo en el que vive el hombre, porque, después de todo, el cuerpo humano también debe preocuparse en el trabajo de estos seres espirituales.
Comencemos con el cuerpo etérico o vital de estos seres, y con el trabajo que realizan en él. Aquí debemos, en primer lugar, acudir a las investigaciones realizadas mediante la conciencia clarividente. Así pues, ¿Dónde encuentra la investigación clarividente algo que pueda designarse como el cuerpo etérico de estos seres Arcangélicos, de estos Arcángeles? y ¿Cómo vamos a entender este trabajo? Todos ustedes saben que las características de la superficie de la tierra varían en diferentes partes, y que en las diferentes partes de nuestra tierra existen condiciones muy diferentes para el despliegue de las características peculiares de los diversos pueblos. El materialista dirá que el clima, la vegetación o quizás el agua de un país y otras cosas determinan las características y peculiaridades manifestadas por la gente de ese país. No debe extrañarles pues, que aquellos cuya conciencia está limitada a las cosas del mundo físico puedan hablar así, porque solo saben lo que pueden ver con sus ojos; pero para la conciencia clarividente es algo completamente diferente.
Cualquiera con conciencia clarividente que viaje por varios países en diferentes partes de la tierra, sabe que la forma peculiar de la vegetación, la configuración característica de las rocas, no agota lo que sabe sobre este país en particular. Cuando hablamos de un aroma peculiar, o de un aura de cierta parte de nuestra tierra, es comprensible que para un materialista solo estemos hablando de una abstracción. Para la conciencia clarividente, surge sobre cada parte de nuestra tierra una peculiar formación como de una nube espiritual que debemos designar como el aura etérica de esa parte especial de la tierra. Este aura etérica es bastante diferente sobre la tierra de Suiza que sobre la tierra de Italia, y ademas diferente sobre las tierras de Noruega, Dinamarca o Alemania. Es cierto que cada hombre tiene su propio cuerpo etérico, y también es cierto que una especie de aura etérica se alza sobre cada parte de la superficie de nuestra tierra. Este aura etérica difiere muy considerablemente de otras auras etéricas, por ejemplo, de la del hombre. Si observamos a un ser humano vivo, descubriremos que su aura etérica está unida a él de por vida, es decir, desde su nacimiento hasta su muerte. Está unida a su cuerpo físico, y solo se ve alterada a medida que el hombre durante su vida pasa por un desarrollo, cuando se eleva más alto en inteligencia, moral, etc. Pero luego siempre vemos que este aura etérica del hombre se altera desde dentro, desarrolla ciertas partes que brillan desde adentro. El caso es diferente con esas auras etéricas que se pueden percibir sobre los diversos países. Ciertamente, estas conservan durante largos períodos un tono fundamental, tienen algo que continúa a lo largo de largas épocas. Pero en estas auras etéricas también hay cambios que se producen rápidamente, y estos las distingue de las auras humanas que se alteran lenta y gradualmente, y que cuando se alteran, la alteración solo tiene lugar desde adentro. Las auras sobre los diversos países se alteran en el curso de la evolución de la humanidad en la tierra cuando un pueblo deja su lugar de residencia y toma posesión de otra parte de la tierra. Lo esencial es que el aura etérica sobre una cierta parte de la tierra no solo depende de lo que surge del suelo, por así decirlo, sino de los últimos habitantes de ese territorio. Así que aquellos que deseen seguir los destinos de nuestra raza humana en su verdadera forma en la tierra, se esfuercen por seguir la interpenetración de esta parte particular de las auras etéricas de las diferentes partes de nuestra tierra. Las diversas auras etéricas de Europa se alteraron mucho en el tiempo que designamos como el período de las migraciones de los pueblos. Ya pueden ver, que en el aura etérica sobre cualquier parte particular de la tierra hay algo que puede alterarse, lo que de hecho puede cambiar repentinamente, y que este cambio puede incluso producirse desde fuera, en cierto sentido. Cada una de estas auras etéricas es en cierto sentido una fusión de lo que proviene de la tierra y de lo que ha sido llevado allí por las migraciones de los pueblos. Cuando consideramos este aura debemos entender claramente que, en cierto sentido, el dicho que se cita tan ligeramente en la Teosofía, pero que nunca se entiende realmente, al menos no en toda su profundidad, es válido en el sentido más amplio; todo lo que se ve afuera en el mundo con conciencia física es solo maya o ilusión. A menudo se menciona entre los teósofos, pero rara vez se observa con tanto detalle como para desempeñar un papel en sus vida. Se cita más bien en forma abstracta, pero si se buscan conexiones concretas, se olvida y solo entra en juego la conciencia material. En verdad, a lo que misteriosamente nos enfrentamos en la parte de la tierra habitada por un pueblo determinado, es al aura etérica de esa parte particular de la tierra. Aquello a lo que se enfrentan los ojos físicos en la vegetación verde, en la configuración peculiar de la tierra y demás, es fundamentalmente maya o ilusión externa; es una condensación, por así decirlo, de lo que está obrando en el aura etérica. Sin embargo, solo esa parte de lo externo depende de este aura etérica sobre la cual, un principio organizador viviente puede tener una influencia. Los Arcángeles, que tienen leyes espirituales dentro de ellos, no pueden intervenir en las leyes físicas. Por lo tanto, donde solo las leyes físicas actúan y entran en consideración, como en las relaciones de montaña y llanura, en los contornos de la tierra y demás, en todos los casos en que aquello que determinó los grandes cambios del pueblo depende de las condiciones físicas, allí no se extiende la influencia de los Arcángeles; aún no han avanzado lo suficiente en su evolución como para poder intervenir en las condiciones físicas. Debido a que no pueden hacer esto, pero dependen de esto, a veces se ven obligados a vagar por la tierra; y se encarnan, como en un cuerpo físico, en aquello que está representado por la configuración del territorio, en aquello, que está gobernado por leyes físicas. El cuerpo etérico del pueblo no puede entrar aún allí, no puede extenderse aún en él y organizarlo. Por lo tanto, se busca el terreno, si resulta adecuado, y de esta unión entre el cuerpo etérico que es elaborado por las fuerzas espirituales del alma y el terreno físico, surge lo que nos encontramos como el encanto peculiar perteneciente a las características de un pueblo, lo que un hombre que no es clarividente puede simplemente sentir en un país, pero que un hombre que observa el país y las personas con conciencia clarividente, es capaz de ver.
Ahora bien, ¿Cómo tiene lugar lo que puede llamarse el trabajo de los Arcángeles, las Almas Nacionales, en este cuerpo etérico que se eleva por encima del suelo? ¿Cuál es el trabajo del Arcángel, cómo trabaja en los seres humanos que se mueven sobre este terreno y viven dentro de esta nube del espíritu nacional? Él trabaja en ello de tal manera que su poder se expresa de tres maneras en el hombre. Es el aura etérica del pueblo la que trabaja en ellos, se entreteje a través de ellos, está activa dentro de ellos. De hecho, este aura etérica obra en el ser humano de tal manera que tres partes en él se ven afectadas por él. A través de la mezcla de estas tres partes surge el carácter peculiar que pertenece a un hombre que vive en este aura etérica del pueblo. ¿A qué parte del hombre afecta esto? Actúa sobre una naturaleza triple en los temperamentos. Actúa sobre los temperamentos que están inmersos en la vida emocional del hombre, aquellos que trabajan en el cuerpo etérico del hombre, pero no en el llamado temperamento melancólico. El aura etérica del pueblo actúa sobre el temperamento colérico, el flemático y el sanguíneo; conjuntamente, por lo tanto, el poder del aura etérica del pueblo fluye hacia estos tres temperamentos. Ahora estos tres pueden mezclarse de muchas maneras diferentes y pueden cooperar de manera diferente en diferentes individuos humanos. Pueden pensar en una infinita variedad de formas en que las tres fuerzas cooperan, cuando una influye en otra, o la conquista, etc. Así surgen las muchas configuraciones con las que nos encontramos, por ejemplo, en Rusia, Noruega o Alemania. Lo que se elabora en los temperamentos constituye el carácter nacional del hombre. La diferencia existente a este respecto entre los varios individuos, solo es causada por el grado de la mezcla. Por lo tanto, los temperamentos nacionales se mezclan según la interpenetración del aura nacional.
Por lo tanto, encontramos a los espíritus nacionales trabajando por toda la tierra. Pero también tienen sus propios caminos a seguir; porque este trabajo en los temperamentos, no es para ellos lo esencial para sus propios asuntos, solo lo hacen porque las fuerzas en el mundo se ven afectadas reciprocamente. Lo hacen ante todo, como actos intencionales propios, como la misión que tienen que hacer. Pero además de esto, también entran en consideración los asuntos de su propio "yo". Estos consisten en el hecho de que ellos mismos progresan en su evolución, que ellos mismos pasan sobre la tierra y se encarnan en una u otra región de la tierra. Este es su propio asunto. Lo otro, lo que hacen en los temperamentos del hombre, es algo que hacen además por vocación. Naturalmente, el hombre mismo también avanza a través de ese trabajo; responde a él. Por lo tanto, el trabajo humano responde sobre el espíritu nacional. Más adelante veremos el significado de los seres humanos individuales para el espíritu nacional. Eso es importante. Pero lo esencial es que deberíamos poder seguir a uno de estos espíritus nacionales; y ver cómo se encarna en el mundo, vive de nuevo durante un tiempo en el mundo espiritual y luego se encarna nuevamente en otro lugar. Cuando observamos estos sucesos, solo estamos observando los asuntos de los egos de estos seres. Ahora bien, para formarnos una idea bastante concreta, imagínense el cuerpo etérico humano incrustado en el cuerpo etérico de la nación; imaginen la interacción del cuerpo etérico humano y el cuerpo etérico de la nación e imaginen además que el cuerpo etérico de la nación se refleja en el temperamento de la nación, en la mezcla de los temperamentos de las personas individuales. Entonces tienen el secreto de cómo el espíritu nacional se nos muestra a su manera dentro de una nación. Ahora, después de haber dicho esto, en realidad hemos agotado el trabajo más importante del verdadero Arcángel o espíritu nacional. No deberíamos haber agotado, ni de lejos, las características de una nación si solo tuviéramos en cuenta el carácter que posee un individuo que pertenece a la nación. Los Seres Arcangélicos, que son los verdaderos Espíritus del árbol tribal, tienen esa tarea.
Pero ahora, a una nación, como pueden fácilmente suponer, le pertenecen muchas más cosas que estas. ¿Por qué? Si el Arcángel, el espíritu guia nacional, no se encontrase con otros Seres en el mismo territorio, y no trabajase junto con ellos en el cuerpo etérico del hombre, muchos de los atributos de una nación no tendrían lugar en absoluto. . El hombre es el escenario de la acción para el encuentro entre los Arcángeles y otros Seres que cooperan con los Arcángeles y, por así decirlo, trabajan en conjunto con ellos. Ahora, desde este trabajo cooperativo surge otra cosa además. La conciencia clarividente, cuando estudia las naciones, encuentra, por extraño que parezca, además de los Seres Arcangélicos ya descritos, otros Seres misteriosos que en ciertos aspectos están relacionados con los Arcángeles, pero que en otros aspectos son completamente diferentes de ellos, sobre todo, en que pueden emplear fuerzas mucho mayores que los Arcángeles mismos.
El espíritu nacional actúa de una manera excepcionalmente delicada e íntima sobre las diversas almas humanas en este entrelazado de los temperamentos; pero aún hay otros Seres que actúan sobre ellos de una manera mucho más fuerte y más poderosa. Debemos, de una vez por todas, ser muy claros en cuanto a estos Seres, partiendo de nuestro conocimiento general de las Jerarquías; entonces, por así decirlo, encontraremos los nombres de estos otros Seres que son observados por la conciencia clarividente.
Deben pensar en las Jerarquías Espirituales de la siguiente manera:
  1. Hombres,
  2. Ángeles,
  3. Arcángeles,
  4. Principados, o Espíritus de la Personalidad, Archai,
  5. Potestades, o espíritus de la forma.
Podríamos llegar ademas a otros que, sin embargo, hoy no vamos tomar en consideración. Si recuerdan lo que hablabamos ayer, -y también lo encontrarán descrito detalladamente en el Registro Akásico y en mi libro Ciencia Oculta-, decíamos que de entre estos Seres, los Arcángeles eran quienes atravesaban su etapa humana en el Periodo del antiguo sol. En ese tiempo los Seres a quienes llamamos Espíritus de la Forma o Potestades, que ahora estan dos etapas por encima que los Arcángeles, estaban precisamente en esa etapa, la de Arcángel; eran seres como los espíritus nacionales que hemos descrito hoy. Esa fue, por tanto, su etapa normal de evolución. Sin embargo, hay un misterio notable en la evolución; es la ley del rezagarse de ciertos Seres, la ley que conlleva que en cada etapa ciertos Seres permanezcan rezagados, de modo que en la siguiente etapa no han alcanzado su evolución normal, sino que realmente tienen la naturaleza que deberían haber tenido en las etapas anteriores. Pues bien, a lo largo de la evolución de nuestra humanidad, siempre ha habido seres que se han quedado rezagados. Entre estos rezagados también se encuentran algunos de estos Espíritus de la forma o potestades, y se han quedado rezagados de una manera muy singular, es decir, que aunque con respecto a ciertos atributos son espíritus de la forma o potestades, y por medio de ciertos atributos pueden hacer lo que en a día de hoy solo pueden hacer los Espíritus de la Forma que han otorgado el 'Yo' al hombre en la etapa de la tierra, ellos ahora no pueden, sin embargo, hacerlo todavía completamente, porque no poseen todos los atributos necesarios. Han quedado tan rezagados que no pasaron por su etapa de Arcángel sobre el Sol, sino que la atraviesan ahora durante el período terrestre, por lo que son Seres que ahora están en la etapa de los espíritus nacionales, aunque poseen atributos bastante diferentes. Mientras que los espíritus nacionales trabajan en la vida humana de una manera íntima porque están solo dos etapas por encima del hombre y, por consiguiente, todavía están relacionados con él, estas potestades, estos espíritus de la forma, se elevan cuatro etapas por encima de la etapa humana. Poseen por tal motivo, muchos y enormes poderes que no serían adecuados para trabajar tan íntimamente en el hombre. Ellos actuarían más vigorosamente, si, pero no tienen otro ámbito para sus actividades que aquel en el que están los espíritus nacionales normales, los Arcángeles. Esa es la dificultad, primero hay que aprender a discriminar en el mundo superior. Aquellos que imaginan que en los mundos superiores pueden manipular con algunas ideas, están muy equivocados. El hombre que, con algunas ideas superficiales, asciende a los mundos superiores, sin duda encontrará a los Arcángeles. Pero se debe discernir si se trata de seres que ahora han alcanzado normalmente la etapa de Arcángel, o aquellos que deberían haber alcanzado esa etapa durante el estado solar de nuestra tierra. Por lo tanto, en el mismo dominio, que los Espíritus de los Pueblos o Arcángeles, hay otros Seres actuando que pertenecen por rango, por así decirlo, a los Arcángeles, pero están dotados con atributos muy diferentes, mucho mas fuertes, como los que poseen los otros Espíritus de la forma, y que por esa razón pueden penetrar profundamente en la naturaleza humana. Porque, ¿Qué parte del hombre han hecho los espíritus de la forma durante la existencia de la tierra? piensen únicamente cómo, el hombre no se podría haber dicho "yo" a sí mismo si los Espíritus de la Forma no hubieran formado el cerebro el cual posee el hombre en la actualidad. Por lo tanto, tales seres pueden trabajar incluso en la forma física, aunque solo estén en la etapa de los Arcángeles. Entran en una especie de prueba de fuerza con los espíritus nacionales en el mismo campo sobre el cual estos últimos están activos.
La primera y principal cosa provocada por este contacto entre estos Espíritus provenientes de estas dos direcciones, es el habla, cosa que no podría ocurrir sin toda la estructura y la forma del cuerpo humano. En la estructura del hombre, tienen su actividad estos otros espíritus Nacionales, que están conectados, tanto con los poderes de la Naturaleza como con el hombre. Por lo tanto, no debemos atribuir nuestro lenguaje meramente a aquellos Seres que trabajan tan íntimamente en el temperamento nacional, y que como Seres que están dos etapas por encima del hombre, imprimen su configuración en un pueblo. Los Seres que otorgan el lenguaje tienen gran fuerza, son realmente 'Potestades', están activos en la tierra porque han permanecido en la tierra, mientras que sus otros compañeros trabajan en el 'Yo', desde el sol hasta el espacio universal. Antes de la aparición de Cristo Jesús, el hombre adoraba a Jahve o al Ser Jehová, y mas tarde adoraba al Ser Crístico como Aquel que trabaja en el espacio universal. Con respecto a los Espíritus del lenguaje, debemos admitir que al hombre le gusta precisamente esa parte del lenguaje que ha quedado con la tierra.
Debemos acostumbrarnos a ideas bastante diferentes. El hombre está acostumbrado a aplicar sus propias ideas al universo entero. Por supuesto, está bastante equivocado al ver el hecho de que estos Seres elevados se hayan quedado rezagados en la evolución como un alumno desaventajado en clase. No se quedan rezagados porque no hayan estudiado, sino por razones relacionadas con la gran Sabiduría que gobierna el mundo. Si ciertos Seres no hubieran renunciado a su evolución normal, y en lugar de marcharse con el Sol, continuaron su evolución en la tierra, entonces lo que llamamos el lenguaje no podría haber surgido en la tierra. En ciertos aspectos, el hombre debe amar su lenguaje, por la misma razón que, por así decirlo, los Seres elevados que por amor, se quedaron rezagados con él y renunciaron a ciertos atributos para que el hombre pudiera evolucionar de acuerdo con lo que decreta la sabiduría. Así como debemos ver el "apresuramiento hacia adelante" como una especie de sacrificio, así también debemos considerar el "quedarse rezagado" en épocas anteriores de la evolución, como una especie de sacrificio, y debemos entender claramente que el hombre no podía de ninguna manera haber alcanzado ciertos atributos si tales sacrificios no se hubieran realizado.
Por consiguiente, vemos cómo en el cuerpo etérico del hombre, y en el del espíritu del pueblo, sometido aquí a consideración, hay dos tipos diferentes de Seres que intercambian trabajo entre sí: los Arcángeles normalmente desarrollados, y aquellos Espíritus de la Forma que se han quedado rezagados en la etapa de Arcángel y han renunciado a su propia evolución, a fin de incorporar en el hombre durante su vida en la tierra, su lengua nacional. Debían tener el poder para transformar la laringe, de modo que se transformara todo el instrumento del habla para que produjera una manifestación física, y eso es el habla misma. Por lo tanto, debemos considerar cuando encaramos cosas tales como el sentimiento nacional, el temperamento nacional y el lenguaje nacional, como el resultado de un trabajo cooperativo. Lo que el hombre puede expresar en palabras, aquello mediante lo cual se muestra como un miembro de su pueblo, lo que él hace sonar en el aire, que es lo que solo pueden provocar esos Espíritus de la Forma en cooperación con los Espíritus Nacionales, porque ellos con sus grandes fuerzas y poderes quedaron rezagados en la etapa de los Arcángeles. Por lo tanto, una cooperación de este tipo tiene lugar en los dominios, en los reinos donde los espíritus nacionales están activos.
Sin embargo, se puede encontrar una cooperación similar en otro dominio. Ayer señalé que hay otras fuerzas trabajando; que son los Principados, los Archai o Espíritus de la Personalidad, que durante la existencia de la tierra representan lo que se llama el Zeitgeist, o Espíritu de la Época. Trabajan de forma, que desde su propio "yo", desde su organización anímica, trabajan en el cuerpo físico, de modo que ponen en movimiento las fuerzas del cuerpo físico. Por lo tanto, debemos suponer que si en algún momento aparece algo como resultado de la actividad del Zeitgeist, algo que se manifiesta en el Espíritu de una Época por la cual la humanidad progresa, eso corresponde a un trabajo con fuerzas físicas dentro de nuestra existencia en la tierra. Esto puede percibirse muy fácilmente, solo necesitan pensarlo para comprender que son necesarias condiciones preliminares físicas reales para que esto o aquello surja en el espíritu de la época; Kepler, Copérnico o Pericles no podrían haber vivido en otra época o bajo otras leyes. Las personalidades surgen de condiciones bastante definidas de los tiempos, de aquellas condiciones que en una determinada época son formadas y organizadas por el trabajo físico de los Seres superiores. Estas son en realidad las condiciones físicas, naturalmente son condiciones físicas, que no debemos concebir como bloques materiales, sino como ciertas configuraciones en la parte física de nuestra tierra en general. A veces estas configuraciones se destacan en gran relieve; en otras ocasiones, cuando el Espíritu de la Época usa su influencia de algún modo en particular, tiene que producirse una constelación física bastante definida. Solo recuerden que en una ocasión, cuando unos niños jugaban en el taller de un cortador de vidrio con algunos trozos de vidrio que habían sido cortados de cierta manera, estas piezas estaban combinadas de forma que se podía observar el efecto óptico como de un telescopio, de modo que el El inventor del telescopio solo necesitaba realizar su observación de esta ley del telescopio.
Ese es un hecho histórico. Sin embargo, piensen tan solo, en los acontecimientos físicos que han sido necesarios para que todo esto pudiera darse. Las lentes primero tenían que ser inventadas, talladas y ensambladas de la manera adecuada. Pueden muy bien, utilizar aquí, la palabra 'casualidad' pero pueden hacerlo únicamente si también se abstienen de comprender la ley que opera en tales casos. Estas condiciones físicas son reunidas por los Archai, las Fuerzas Primarias. El reflejo de su trabajo es eso que se reúne en un punto sobre la tierra que, de otro modo, como Espíritu de la Época, trabaja de varias maneras. Imagínense qué habria sido de muchas cosas físicas en los tiempos modernos, si este trabajo de los Archai en los cuerpos físicos no hubiera tenido lugar. Es realmente el trabajo de los Archai el que actúa de esta manera y en esta dirección. Ahora bien, si los Archai actúan así y dirigen el Espíritu de la Época, podemos preguntar de nuevo: "¿Cómo pueden estos Espíritus de la Época
realmente guiar el progreso humano por medio de la intuición?" Lo hacen de tal manera que se estimula a un ser humano como por casualidad, por algo que tiene lugar en el mundo físico. Esto no es una mera legenda, a veces ocurre. Solo necesito recordarles la lámpara colgante de la Catedral de Pisa, donde, al observar la regularidad del balanceo de la lámpara, Galileo descubrió la ley del péndulo y cómo más tarde Kepler y Newton fueron estimulados a hacer sus descubrimientos. Podríamos relatar cientos y miles de casos en los que los eventos físicos y el pensamiento humano se juntaron, mediante los cuales podría percibirse cómo las Fuerzas Primarias o Archai instilan a través de la intuición las ideas que surgen en el mundo como las ideas de la época, que luego influye en el hombre en su desarrollo, regula su progreso y lo permea con la ley.
Pero también en este dominio, esos Seres que durante nuestra existencia en la tierra, normalmente se han convertido en Espíritus de la Personalidad, trabajan en conjunto con otros seres que debido a que permanecieron rezagados en la Luna, ahora no son Espíritus de la Forma o Potestades tal como deberían ser en la tierra, sino que ahora también trabajan solamente como espíritus de la personalidad. Así pues, aquellos Seres que renunciaron a su evolución no en la etapa del Sol sino en la etapa de la Luna, ahora son Espíritus de la Personalidad, pero no poseen los atributos que normalmente deberían tener; es decir, no instilan intuiciones de la misma manera que lo hacen los Espíritus normales de la Personalidad, sino como lo hacen los Espíritus de la Forma rezagados. No estimulan desde afuera, dejando que el hombre mismo observe lo que se produce en lo físico, sino que lo hacen interiormente, trabajando dentro del cerebro y dándole una cierta proclividad al pensamiento. Consecuentemente el pensamiento del hombre en las diferentes épocas es estimulado desde adentro, de modo que cada época tenga un tipo distinto de pensamiento. Esto está relacionado con delicadas formaciones del pensamiento, con las constelaciones internas. Aquí los espíritus de la forma rezagados que tienen el carácter de espíritus de la personalidad, trabajan dentro del hombre y producen un cierto tipo de pensamiento, una forma bastante definida de ideas. De ahí que el hombre no solo es guiado de época en época de acuerdo con la voluntad de los espíritus intuitivos de la personalidad, por los cuales se deja agitar para hacer esto o aquello, sino que es impulsado como por fuerzas internas para que el pensamiento se manifieste físicamente desde adentro, del mismo modo que en el lenguaje hablado quedó manifiesto lo que quedó atrás de los Espíritus de la forma. Por lo tanto, en el método de pensamiento hay una manifestación de los Espíritus de la forma que aparecen en nuestra época como Espíritus de la Personalidad. Estos, por lo tanto, no son aquellos Espíritus de la Personalidad que trabajan delicadamente y que permiten que un hombre haga lo que quiera, sino aquellos que toman posesión de él y lo empujan con fuerza. Por lo tanto, en aquellos hombres estimulados por el Espíritu de la Época, siempre se pueden observar estos dos tipos. En aquellas personas que son estimuladas por los verdaderos espíritus de la Época que están en su etapa normal, pueden ver a los verdaderos representantes de su tiempo. Podemos considerar a estos como hombres que tuvieron que venir, y en sus actividades como algo que no podría tener lugar de ninguna otra manera. Pero hay otras personas, en las que están activos esos otros Espíritus de la Personalidad que son en realidad Espíritus de la Forma. Esos son los otros Espíritus a quienes acabamos de nombrar como los Espíritus del Pensamiento, aquellos que durante el ciclo de la antigua luna avanzaron a su actual punto de evolución.
Ahora el hombre es el escenario de acción sobre el cual todo esto obra en conjunto. Esta cooperación se demuestra por el hecho de que el habla y el pensamiento entran en relaciones recíprocas, que no solo los Espíritus que están en la misma etapa entran en relaciones recíprocas, sino que también los Arcángeles normales, que gobiernan el sentimiento y el temperamento nacional, entran en relaciones recíprocas con aquellos otros que acabamos de describir, no solo por lo tanto con los Espíritus de la Forma que están en la etapa de Arcángel, sino también con aquellos Espíritus de Personalidad que en realidad son Espíritus de la Forma rezagados.
Estos dos tipos aparecen en la naturaleza humana y en el ser humano. Esta relación es extremadamente interesante de estudiar cuando con el conocimiento oculto y el poder de visión oculto uno pasa de un pueblo a otro. Entonces uno puede ver cómo actúan los Espiritus Nacionales normales, y cómo entonces reciben sus órdenes de los Espiritus de la Época. Pero estos espíritus nacionales trabajan dentro del hombre junto con los Espíritus del lenguaje y también con los espíritus del Pensamiento que trabajan en los pensamientos del hombre. Dentro del hombre no solo hay Arcángeles normales y anormales, sino también Arcángeles en contraposición a los Espíritus anormales de la Personalidad que desde dentro gobiernan el trabajo del pensamiento en una época en particular.
Ahora es extremadamente interesante, - ya he dicho que se verán afectadas las condiciones que se deben conocer con su comprensión espiritual, que deben revestirse de palabras comunes porque todavía no se ha creado ningún lenguaje que haga que todo esto sea creíble y claro; se tiene que expresar todo en palabras que pueden representar los hechos de una manera figurativa, pero que sin embargo, corresponden a un hecho importante en la evolución de la humanidad, - es extremadamente interesante e importante seguir la evolución de la humanidad en tiempos más recientes; es importante saber que una vez se llegó a un acuerdo recíproco entre uno de los Espíritus guía de los Pueblos, que es un Arcángel normal, y uno de esos otros Espíritus que trabajan interiormente como Espíritus de las Fuerzas del Pensamiento, un Espíritu de la Personalidad anormal , y en una cierta época histórica se verá el resultado serio e importante de este acuerdo. Para hacer que este acuerdo fuera más completo, se estableció una relación armoniosa con el Arcángel anormal correspondiente, que era el Espíritu guía del lenguaje en ese momento; de modo que hubo un punto en la evolución de la humanidad, en el cual, por así decirlo, los Arcángeles normales y anormales trabajaban juntos y en el cual, además de esto, trabajaba como un impulso adicional el tipo de pensamiento que se producía desde dentro por un Espíritu de la personalidad anormal. El acuerdo alcanzado entre estas tres partes se reflejó en un pueblo en particular. Ese fue el pueblo indio, que introdujo la civilización post-Atlante en la primera era post-Atlante. Fue durante esta civilización india cuando surgió la constelación en la que estos tres Seres pudieron trabajar conjuntamente de forma más armoniosa. La consecuencia de ello es todo lo que podemos llamar el papel histórico de este pueblo indio. Incluso en aquellas épocas de las que aún se conservan las tradiciones históricas, los efectos de ese acuerdo aún continuaban actuando. Esa es la razón por la cual el antiguo lenguaje sagrado de los indios actuó con tal poder y produjo esos poderosos efectos históricos en la civilización, y el por qué pudo actuar tan poderosamente incluso en épocas posteriores. Este poder fue traído por los Arcángeles anormales que trabajaban en el lenguaje. El poder del lenguaje sánscrito radica en el acuerdo del cual acabo de hablar. Y nuevamente la singular filosofía india, que como pensamiento creativo actuando desde dentro del hombre aún no ha sido igualado por ningun otro pueblo del mundo, también radica sobre ella; la plenitud interna del pensamiento que pertenece a la cultura india se basa también en este acuerdo. En todas las otras partes del mundo observamos diferentes condiciones; pero en todas ellas se pudo observar en ese tiempo lo que acabo de describirles. Por lo tanto, es tan infinitamente fascinante seguir estas lineas de pensamiento, que toman la forma peculiar que tienen, porque no han procedido del predominio del Arcángel normal sobre el anormal, sino de su total armonización, porque cada pensamiento era realmente absorbido por el temperamento del pueblo y amorosamente hilado en los detalles en aquél tiempo en qué el pueblo indio representaba el primer florecimiento cultural de la época post-Atlante. Y el lenguaje obró de esta manera porque allí el conflicto, que habría tenido lugar en todas partes, no había surgido porque tal cooperación tuvo lugar entre el Arcángel de la evolución normal y el Arcángel de la evolución anormal. Por lo tanto, se puede decir que este lenguaje, vertido desde el temperamento más puro, es en sí mismo un producto de ese temperamento. Ese es el secreto de la primera civilización de la época post-Atlante. Eso, sin embargo, es lo que debe observarse en todos los demás pueblos, a saber, que en ellos tiene lugar una cooperación única entre estas tres fuerzas, entre el espíritu nacional normal o Arcángel, el Arcángel anormal, y lo que actúa internamente en el Espíritu de la Época anormal, que trabaja, no como un Espíritu de la Época , sino desde adentro, y finalmente lo que el verdadero Espíritu de la Época tiene que transmitir interiormente a la nación.
El verdadero conocimiento de un pueblo proviene de escuchar estas fuerzas dentro de sí mismo, y ponderar la participación que tiene cada factor en la constitución de los pueblos. Por lo tanto, se ha vuelto difícil para las personas que no toman en consideración las fuerzas ocultas de la evolución humana, definir realmente la palabra "nación". Examinen los diversos libros en los que, en cualquier parte del mundo, se define el concepto de "nación", y verán cuán curiosas definiciones hay y cuánto difieren entre sí. De hecho, tienen que diferir, porque un escritor / historiador siente más lo que procede del lado de los Arcángeles normales, otro lo que procede de los Arcángeles anormales, y un tercero de lo que proviene de las diversas personalidades del pueblo. Cada uno siente algo diferente y lo usa en su definición. Eso es exactamente lo que la Ciencia Espiritual nos ha dejado claro, que estas definiciones no siempre tienen que estar equivocadas; pero siempre se ven empañadas en maya, en ilusión. Por lo que dice un escritor / historiador, se puede ver que solo observa lo que es maya y que deja inadvertidas a las diversas fuerzas que actúan.
Por lo tanto, uno naturalmente siempre obtendrá concepciones muy diferentes, si desde el punto de vista antroposófico uno observa un pueblo como el suizo, que vive en un mismo país y se hablan tres idiomas, y por otro lado pueblos que hablan un solo idioma.
En cuanto a por qué algunas naciones actúan más bajo la influencia del Espíritu de la Personalidad, es decir, por qué su vida se compone especialmente de la cooperación de varias personalidades, tendremos que hablar más adelante. Los pueblos / naciones cuya existencia está más bajo la influencia del Espíritu de la Personalidad anormal también se encuentran en la tierra; esos Espíritus de la Personalidad no actúan para el avance del progreso de la evolución. Solo necesitan estudiar el carácter de los norteamericanos, allí tienen un pueblo absolutamente basado en este principio.
Se puede ver por tanto, que solo comprenderemos la historia del mundo, en la medida en que consiste en las historias de los pueblos, si seguimos a los Arcángeles normales y anormales, los Espíritus de la Personalidad normales y anormales en sus posiciones recíprocas, y en su trabajo cooperativo, y al mismo tiempo seguimos su trabajo en los pueblos que se suceden en el transcurso de la historia del mundo.
Traducida por Julio Luelmo Abril 2018

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El objetivo de este blog es publicar en Internet todo el material fuente existente para las transcripciones de las conferencias de Rudolf Steiner de la forma más completa posible, para que este gran tesoro esté disponible para toda la humanidad. Se trata de notas de oyentes, transcripciones de conferencias y, en su mayor parte, transcripciones en texto plano de conferencias estenografiadas, también conocidas como transcripciones en texto plano. De este modo, cualquiera puede comprobar por sí mismo, mediante comparaciones, qué dijo realmente Rudolf Steiner y cómo fue editado (y, por tanto, modificado) en las distintas ediciones. Y por último, pero no menos importante, también encontrarán mucho material inédito. La obra de Rudolf Steiner es de dominio público desde 1996 y, por tanto, pertenece legalmente a toda la humanidad. Él mismo habría elegido una fecha mucho más temprana para la publicación de su obra, como se desprende de los pasajes sobre propiedad intelectual que citamos a continuación; Incluso el período de protección de 30 años que se aplicaba entonces le parecía demasiado largo. ¿Y qué habría dicho sobre el hecho de que 85 años después de su muerte, parte de su obra docente siga inédita y acumulando polvo en los archivos? Él mismo encontró una expresión adecuada para esto: Fue puesto en un ataúd. Este sitio web está destinado a ayudar a liberarlo de este ataúd. "Lo que el hombre puede crear a partir de sus capacidades intelectuales se lo debe a la sociedad humana, al orden social humano. En realidad, no le pertenece. ¿Por qué gestionamos nuestra propiedad intelectual? Simplemente porque la produces; al producirla, demuestras que tienes la capacidad de hacerlo mejor que los demás. Mientras tengas esa capacidad mejor que los demás, gestionarás mejor esa propiedad intelectual al servicio del conjunto. Ahora la gente se ha dado cuenta al menos de que esta propiedad intelectual no se perpetúa sin fin. Treinta años después de la muerte, la propiedad intelectual pertenece a toda la humanidad. Cualquiera puede imprimir lo que yo he producido treinta años después de mi muerte. Puede utilizarlo como quiera; y eso está bien. Incluso estaría de acuerdo si hubiera más derechos en este ámbito. No hay otra justificación para la gestión de la propiedad intelectual que el hecho de que, porque se puede producir, también se tienen las mejores capacidades [...] Será una forma sana de socializar el capital si hacemos fluir en el organismo social lo que hoy se acumula como capital en el derecho de sucesiones, en el surgimiento de las pensiones, del derecho de las manos ociosas, de los derechos humanos superfluos, lo que así se acumula en capital; eso es lo que importa. Ni siquiera hace falta decir que la propiedad privada debe convertirse en propiedad social. El concepto de propiedad no tendrá ningún significado". Rudolf Steiner el 25 de abril de 1919